Autor: Karmelo Iribarren
Editorial: Renacimiento
Páginas: 104 páginas
Este es el último poemario que he tenido el placer de leer: Ola de frío (Karmelo Iribarren).
Después de leer su antología poética titulada "Seguro que esta historia te suena" y el poemario "Atravesando la noche" (ambas reseñas en este blog) he de decir que Karmelo mantiene el nivel y la calidad de los anteriormente citados.
El centenar de poemas que recoge este ejemplar son ápices de realidad y autenticidad. La sucesión de poemas hacen que el lector no se despegue de su lectura hasta que termina el libro. Historias y vivencias de su existencia con un lenguaje directo, cotidiano y un tanto melancólico; algunos de sus poemas son un directo al mentón, otros guardan un toque irónico en su interior y otros tantos poseen un humor que te esbozan una sonrisa en el rostro a medida que los vas leyendo.
Por último, me reafirmo una vez más en mi convicción de que estamos ante uno de los GRANDES poetas que ha dado este país.
A continuación extraigo un par de poemas.
LA FOTO DE RAYMOND CHANDLER
Levanto la vista y lo veo sobre la balda,
con su pipa y su sonrisa de borracho.
Para mí que se acaba de meter un lingotazo
entre pecho y espalda
y que le está subiendo ahora mismo.
En sus ojos ese brillo acerado
del que sabe que estás pasándolas putas
porque también se ha visto ahí.
Es decir, aquí, frente
a este maldito folio en blanco
al que no sé muy bien qué contar.
Las ideas son veneno, dijiste,
cuanto más razonas, menos creas.
Cuánta verdad, amigo Chandler, cuánta verdad.
A veces lo mejor es soltar lastre,
dejar toda tu impotencia en el papel.
¿Que te pone verde algún crítico?
El tiempo le pondrá amarillo a él.
con su pipa y su sonrisa de borracho.
Para mí que se acaba de meter un lingotazo
entre pecho y espalda
y que le está subiendo ahora mismo.
En sus ojos ese brillo acerado
del que sabe que estás pasándolas putas
porque también se ha visto ahí.
Es decir, aquí, frente
a este maldito folio en blanco
al que no sé muy bien qué contar.
Las ideas son veneno, dijiste,
cuanto más razonas, menos creas.
Cuánta verdad, amigo Chandler, cuánta verdad.
A veces lo mejor es soltar lastre,
dejar toda tu impotencia en el papel.
¿Que te pone verde algún crítico?
El tiempo le pondrá amarillo a él.
LA PARTE VIEJA
Ni una mujer
ni una idea,
lo mejor de mi vida
te lo quedaste tú,
tus calles,
tus tabernas,
aquellas noches de sábado
en las que todo era posible,
aquellas madrugadas
de invierno, desiertas.
ni una idea,
lo mejor de mi vida
te lo quedaste tú,
tus calles,
tus tabernas,
aquellas noches de sábado
en las que todo era posible,
aquellas madrugadas
de invierno, desiertas.
Ahora me acerco a veces,
pero nada es igual.
pero nada es igual.
Paso de largo y pienso:
fue una época.
fue una época.
En resumen: Un poemario excelso, puro e incontestable. Esencial.
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